Este artículo es una estimación científica real de la dimensión de hombres que hacen sexo con hombres en el Brasil entre 15 y 54 años. Uruguay y Argentina podemos estimar una proporción similar. Como Brasil es menos sexofóbico, quizás su proporción de HSH sea algo mayor que la nuestra.
Conocimiento, prácticas y conductas relativas a la transmisión de VIH entre la población brasileña del grupo etario entre 15-54 años de edad, 2004.
Artículos Originales
AIDS. 19 Suppl 4:S51-S58, Octubre 2005.
Szwarcwald, Celia Landmann a; Barbosa-Junior, Aristides b; Pascom, Ana Roberta b; de Souza-Junior, Paulo Roberto a
Resumen:
Objective: Describir la vulnerabilidad de transmisión para adquirir la infección de VIH entre la población brasileña entre los 15-54 años de edad
Diseño: Encuesta con base poblacional.
Methods: El muestreo se estratificó por región geográfica. Se condujeron un total de 6006 entrevistas. Se estimaron los indicadores de conocimiento y prácticas sexuales y los tamaños relativos de los subgrupos vulnerables. Se usó análisis de regresión logística para determinar los factores principales asociados con las prácticas de sexo seguro.
Resultados: En cuanto a los indicadores de conocimiento del grupo de edad de 15-24 años, un alto porcentaje (91%) citaron espontáneamente la relación sexual penetrativa como forma de transmisión de VIH, y 62% tenían conocimiento correcto de los modos de transmisión de Vih (cinco ítems correc tos). La proporción de uso consistente de condones con parejas casuales fue del 52%, aumentando al 59% en el grupo de edad más joven. Las proporciones más altas de uso inconsistente de condón con cualquier tipo de pareja se encontraron entre las mujeres y entre los más pobres. Una multiplicidad de parejas sexuales, el estatus socioeconómico bajo y el uso de cocaína fueron predoctores importantes de sexo no protegido entre los hombres que vivían sin un/a compañero/a. Entre los individuos cuya edad era de 15-49 years, 0.2% se inyectaban cocaína en el momento del estudio, 4.6% de los hombres pagaban por sexo al menos una vez en el año anterior al estudio y 1.0% de las mujeres recibieron pago a cambio de sexo. Entre los hombres sexualmente activos del mismo grupo de edad, 3.5% informaron relaciones sexuales con otros hombres.
Conclusión: Aparte de la necesidad de establecer el rol ejercido por los subgrupos vulnerables en la dinàmica de transmisión del VIH, los resultados indican que es necesario investigar más a profundo las prácticas sexuales no seguras entre los sectores más pobres de la sociedad.